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Alumnos tímidos

Cuando treinta preadolescentes se ven obligados a intervenir en una representación teatral de su colegio es frecuente que el interés de algunos esté próximo a cero. Otros en cambio, queriendo participar, pueden sufrir ante la idea de salir al escenario. Nadie está libre de la vergüenza, pero con trece años el sentimiento puede ser paralizante.  Ninguna de mis obras incluye personajes del tipo “árbol, sol, nube o centurión 5” que están disfrazados en escena sin pronunciar ni una palabra.

En función del grado de implicación, vergüenza casi insuperable o interés del alumno, en mis obras propongo las siguientes soluciones:

• Personaje grupal: El personaje está multiplicado. En lugar de un soldado/policía/empresario aparecen de dos a cinco de ellos. El actor nunca está solo en el escenario y se reparten entre todos las líneas del personaje.
• Técnico de sonido: El alumno está en escena, sentado a una mesa con un lanzador de samples conectado a un altavoz. Se encarga de los efectos de sonido: disparos, truenos, música, pasos… El encargado no tiene que hablar en el escenario, pero participa a lo largo de toda la representación.
• Personaje con máscara: A menudo, el alumno que se niega en redondo a salir a escena, se anima a hacerlo si no muestra el rostro.
• Presentador: Hay alumnos que no temen salir a escena, pero sí a la interpretación de un personaje, por un sentimiento de ridículo. Por ello las obras incluyen casi siempre uno o más presentadores.
• FX/CREW: Es el equipo que se encarga de montar y desmontar la escenografía y attrezzo. También se encargan de los efectos especiales (máquina de humo, estructuras móviles, efectos de iluminación puntuales) Visten de negro y son parte importante de la representación, pero no actúan.
• Voz en off: Si el alumno no quiere salir de ninguna manera al escenario, siempre queda el recurso de que se oiga su voz pregrabada en un entorno que le resulte cómodo (puede ser su propia casa). De esta manera actúa en la obra y tiene un personaje propio: la voz de un dios, de un ordenador que controla una nave espacial, el pensamiento de uno de los personajes de escena o un narrador omnisciente.

Escenografía y disfraces

El colegio donde trabajo no dispone de teatro propio, alquilamos uno para la representación, de manera que la escenografía es siempre sencilla: aquella que quepa en una furgoneta y se pueda montar y desmontar en un momento.

Escribo los personajes de manera que el disfraz nunca complique demasiado al alumno y su familia. Abundan, pues, los personajes arquetipo cuya caracterización pueda adquirirse fácilmente y por poco dinero en bazares o tiendas online, o cuya versión artesanal resulte sencilla si uno es manitas.

Precio y derechos de autor

Como todo el mundo sabe, un profesor en España gana un sueldo tal que el dinero deja de tener importancia. Todas las obras que están en esta página son gratis. Dispón de ellas a tu antojo. Siéntete libre de traducirlas a cualquier idioma, compartirlas y adaptarlas a las necesidades de tu curso y, por supuesto, las aportaciones de los alumnos son más que bienvenidas (si los alumnos se implican hasta ese punto, todo lo demás ya da igual y ha sido para bien). Las obras son gratis siempre que no se obtenga un rendimiento económico de ellas, es decir, mientras se representen en certámenes escolares o eventos culturales en los que no se cobre entrada. Todas están inscritas en el Registro de la propiedad intelectual de Madrid y tienen licencia Creative Commons CC BY-NC-SA 4.0, que obliga únicamente a citar siempre la autoría, no obtener rendimiento económico y difundir las posibles alteraciones bajo la misma licencia que el original.

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